Autódromo Nacional del Algarve: Portimao

A principios del siglo XXI, un grupo de visionarios en la región portuguesa del Algarve soñaba con un trazado de carreras que colocara a Portugal en el mapa del automovilismo internacional. Su objetivo era crear una pista desafiante, segura y con un entorno único que atrajera a los mejores pilotos y competiciones del mundo.

Desde sus inicios en 2002, cuando se anunciaron los primeros planes para el circuito, hasta su destacada posición como sede de eventos de primer nivel como la Fórmula 1 y MotoGP en la actualidad, la historia del circuito ha estado llena de altibajos. Después de varios años de problemas financieros que mantuvieron el proyecto en espera, el impulso del gobierno portugués en 2005 revitalizó los planes para el circuito, con la asignación de 300 hectáreas de tierras y concesiones fiscales clave para su desarrollo.

Las obras de construcción se iniciaron en 2006 y, tras tres años de intenso trabajo, el AIA se inauguró oficialmente el 22 de noviembre de 2008. La inversión total ascendió a 195 millones de euros, y el resultado fue un trazado de 4,689 kilómetros homologado por la FIA y la FIM para competiciones internacionales. La pista cuenta con 16 curvas (con tres variantes distintas), una recta de meta de 873 metros y un desnivel total del trazado de 68 metros.

Falta de financiación

A pesar del éxito inicial en la pista, problemas financieros comenzaron a surgir detrás de escena. La acumulación de deudas significativas puso en peligro la viabilidad a largo plazo del proyecto, y se necesitaba intervención externa para evitar el colapso total. En 2013, el Estado portugués intervino adquiriendo el control de Parkalgar, la empresa que operaba el circuito, en un esfuerzo por estabilizar su situación financiera.
Con el apoyo renovado del Estado, el circuito fue capaz de completar las obras pendientes y expandir sus instalaciones, incluyendo un hotel de lujo y apartamentos modernos. Además, se realizaron esfuerzos para fortalecer el calendario de eventos, atrayendo competiciones de renombre como el World Superbikes y la FIA GT.

De vuelta a la gloria

El resurgimiento del circuito no pasó desapercibido por las principales organizaciones deportivas, con la FIA otorgando al circuito una clasificación de Grado 1 completa y MotoGP considerándolo como un evento de reserva en caso de cancelaciones en el calendario.

La culminación de estos esfuerzos llegó en 2020, cuando el circuito fue seleccionado para albergar el Gran Premio de Fórmula 1 de Portugal y el Gran Premio de Motociclismo de Portugal en la misma temporada. Estos eventos no solo destacaron la calidad del circuito y su capacidad para albergar eventos de primer nivel, sino que también llevaron emoción y entretenimiento a los aficionados locales y de todo el mundo al presentar unas carreras repletas de acción en pista y emoción.

Más allá de su exigencia técnica, el AIA ofrece un entorno único para disfrutar de la pasión por el motor. Las vistas panorámicas del océano Atlántico y las colinas circundantes crean un escenario incomparable, mientras que las instalaciones modernas y la amplia oferta de servicios garantizan una experiencia inolvidable para pilotos, equipos y aficionados.

El futuro del Circuito de Portimão parece prometedor, con planes para continuar atrayendo eventos deportivos de élite y expandir sus instalaciones para satisfacer las crecientes demandas de la industria. Con una sólida base financiera respaldada por el Estado portugués y un reconocimiento global como una de las principales sedes de carreras en Europa, el circuito está listo para seguir escribiendo su historia en el mundo del automovilismo.