Circuito Phillip Island

El rugido de los motores y el olor a gasolina impregnan el aire de Phillip Island, una isla ubicada en el sur de Australia, famosa por su circuito y por ser el hogar de una gran colonia de pingüinos. La historia del circuito se remonta a principios del siglo XX, cuando las carreras de motor se disputaban en trazados improvisados sobre la arena. Hoy en día, Phillip Island es un referente mundial del motociclismo, albergando el Gran Premio de Motociclismo de Australia desde 1989.

Los inicios: Un trazado improvisado en la arena

Las primeras competiciones motorísticas en Phillip Island se remontan a la década de 1920, cuando se disputaban carreras de automóviles en un circuito improvisado sobre la arena. En 1931, las motocicletas también se unieron a la acción, utilizando este mismo trazado rudimentario. La isla se convirtió en un lugar popular para los aficionados a las carreras, atraídos por la emoción de la competición y el entorno natural único.

En 1956, se inauguró el primer circuito permanente de Phillip Island, un trazado de 3,7 km que contaba con curvas cerradas y rectas largas. Este nuevo circuito supuso un salto adelante para las carreras en la isla, permitiendo la celebración de eventos de mayor envergadura.

Auge y caída: Un circuito con altibajos (1956-1988)

Las décadas de 1960 y 1970 fueron una época dorada para el circuito de Phillip Island. El trazado acogió carreras internacionales de motociclismo y automovilismo, incluyendo el Gran Premio de Australia de 500cc en 1962 y 1963. Sin embargo, a finales de la década de 1970, el circuito comenzó a decaer debido a problemas financieros y organizativos. Las carreras se hicieron menos frecuentes y las instalaciones se deterioraron.

En 1985, el gobierno australiano intervino y compró el circuito, iniciando un proceso de renovación y modernización. Se invirtieron 5 millones de dólares australianos en la mejora de las instalaciones, la seguridad y el trazado del circuito.

El resurgimiento: Referencia del motociclismo (1989-actualidad)

La inversión realizada en la década de 1980 dio sus frutos. En 1989, Phillip Island albergó por primera vez el Gran Premio de Motociclismo de Australia, un evento que se ha convertido en uno de los más importantes del calendario mundial. Las batallas entre leyendas como Wayne Gardner, Mick Doohan y Kevin Schwantz quedaron grabadas en la memoria de los aficionados. El circuito también ha acogido otras competiciones internacionales de motociclismo, como el Campeonato Mundial de Superbikes y el MotoGP.

En la actualidad, Phillip Island es un referente mundial del motociclismo. Su trazado desafiante, su entorno natural único y la pasión de los aficionados australianos por las carreras lo convierten en un lugar mágico para los amantes de este deporte. Más allá del motociclismo, la pista también se utiliza para otras actividades como carreras de automóviles, ciclismo y eventos corporativos.

Además de ser famoso por su circuito, Phillip Island es también el hogar de una gran colonia de pingüinos de ojos pequeños. Cada noche, al atardecer, los pingüinos salen del mar y caminan por la playa hasta sus madrigueras. Este espectáculo único se ha convertido en una de las principales atracciones turísticas de la isla. Se están llevando a cabo iniciativas para promover la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente, como el uso de energía renovable, la gestión de residuos y la conservación del agua.