Circuito Urbano Internacional de Mandalika

Indonesia, con su vasto archipiélago y una cultura vibrante, ha anhelado durante mucho tiempo convertirse en el epicentro del emocionante mundo de las carreras de MotoGP. Sin embargo, el camino hacia la realización de este sueño ha estado lleno de giros y obstáculos que desafiaron la tenacidad del país insular.

La historia comienza con el antiguo Circuito de Sentul, cuyos planes de modernización no lograron cumplir las expectativas, dejando a los entusiastas del motociclismo con un sabor agridulce. Pero la determinación de Indonesia no se vio menguada por este revés, y una nueva oportunidad surgió con el ambicioso proyecto de un circuito permanente en Palembang, Sumatra del Sur, diseñado por el renombrado Hermann Tilke.

El destino finalmente sonrió a Mandalika, cuando en 2018, Carmelo Ezpeleta, el director de Dorna, visitó el lugar, inyectando una nueva vida al proyecto. La decisión de albergar tanto MotoGP como los Campeonatos del Mundo de Superbikes en Mandalika desde 2021 generó un revuelo entre los fanáticos del motociclismo de todo el mundo.

Inversión masiva de dinero

La asociación con Vinci Construction Grand Projects, el principal inversor del proyecto, garantizó una inversión masiva de mil millones de dólares, con una visión de desarrollo a largo plazo. Además del circuito en sí, el proyecto incluyó la construcción de una amplia gama de instalaciones de apoyo, desde un centro comercial hasta un hospital y edificios residenciales.

MRK1 Consulting y RoadGrip Motorsport, designados por la Corporación de Desarrollo Turístico de Indonesia (ITDC), asumieron el desafío de dar vida al circuito. Conscientes del escepticismo inicial, los arquitectos y consultores garantizaron que el diseño y la construcción cumplieran rigurosamente con los estándares de seguridad de la FIM para MotoGP.

El circuito de Mandalika, con sus 4.32 kilómetros de longitud y 17 curvas desafiantes, recibió el respaldo del Oficial de Seguridad de la FIM, Franco Uncini. Inspirado en el plan maestro del complejo turístico existente, el diseño se adaptó para garantizar la seguridad y el cumplimiento de los estándares internacionales de carreras.

Un proyecto más allá del propio trazado

El proyecto también tenía como objetivo la construcción de once hoteles con alrededor de 1,900 habitaciones, complementados por mejoras en el aeropuerto de Lombok y una terminal para ferries y lanchas rápidas. Sin embargo, la pandemia de COVID-19 trajo consigo una serie de desafíos inesperados, desde restricciones de viaje hasta dificultades para la supervisión del progreso de la construcción.

Una de las características únicas del proyecto fue la versatilidad del circuito. Gran parte de las instalaciones fueron diseñadas para ser desmontables, permitiendo que el espacio se transformara en una red de carreteras para el resort durante el resto del año. Además, el edificio de boxes se planificó como un centro multifuncional, albergando conferencias y exposiciones cuando no esté en uso para eventos de carreras.

Primeros GPs de motos

A pesar de estos contratiempos, el Circuito Internacional de Mandalika abrió sus puertas en noviembre de 2021, marcando un hito significativo en la historia del motociclismo en Indonesia. El presidente Joko Widodorenombró el trazado como Pertamina Mandalika International Street Circuit.

Aunque las condiciones climáticas fueron adversas, las carreras de la categoría de Superbikes se llevaron a cabo con éxito.
Sin embargo, los problemas con la superficie de la pista salieron a la luz de manera dramática. El asfaltado no se había realizado con los estándares de calidad necesarios y en seco apenas tenía agarre. La sorpresa fue ver que en mojado las vueltas eran bastante parejas en tiempo.

En el 2022 llegaría la categoría reina, MotoGP, y los problemas del asfalto resurgieron. En plenos test de pretemporada, un excesivo calor ambiental provocaba que el asfalto se arrancara con la fuerzas sometidas por los neumáticos Michelin. Las piedras saltaban y golpearon a varios pilotos. Por si fuera poco, el polvo de la pista debido a la suciedad también fue un problema.

Para la carrera se realizaron algunos parches en las zonas que quedaron más deterioradas. Como ocurrió con las SBK, la carrera estuvo marcada por un fuerte diluvio. Con un retraso de una hora y distancia reducida, los pilotos de MotoGP mostraron su enorme destreza en condiciones complicadas. La victoria se la adjudicó el piloto de KTM Miguel Oliveira.